jueves, 21 de marzo de 2013

El Parlamento de Chipre tratará un "plan extraordinario" de rescate con más control de capitales

El Gobierno y los líderes políticos acordaron un proyecto de ley para afrontar la crisis financiera del país, que contempla la imposición de un control de capitales y poderes extraordinarios para el equipo económico y el Banco Central.



chipreEl proyecto, que debería haber sido tratado hoy por el Parlamento, pasará por el examen de los legisladores mañana, después de este acuerdo in extremis logrado por la clase dirigente chipriota bajo una fuerte presión de la Unión Europea (UE).

El borrador de ley prevé que el ministerio de Finanzas y el Banco Central puedan tomar las medidas que consideren necesarias para mantener el dinero en el país.


Se espera que la ley prohíba la transferencia al extranjero de grandes cantidades sin la autorización del ente monetario por tiempo indefinido.


Los bancos chipriotas llevan seis días cerrados y, en principio, volverán a abrir sus puertas el martes.


Chipre vivió otro día de fuertes tensiones, con una economía que está al borde de la quiebra, ya que estallaron disturbios entre manifestantes y policía frente al Parlamento en Nicosia, mientras que el Banco Central aseguraba la cobertura de los depósitos bancarios hasta 100.000 euros.


Muchos de los manifestantes eran empleados de la Laiki Bank (segundo banco más importante del país) que se reunieron ante el Congreso después de rumores sobre la posible clausura de ese instituto de crédito a raíz de una fusión con el Bank of Cyprus.


El Banco Central Europeo hizo saber que garantiza e nivel actual de liquidez sólo hasta el lunes.


El proyecto de ley que intenta responder a la crítica situación financiera llegó esta noche (hora local), después de que, a lo largo del día, se celebraran frenéticas reuniones entre el premier Nicos Anastasiades, líderes políticos y técnicos del banco central nacional.


Tras una reunión celebrada por teleconferencia esta tarde, los ministros de Finanzas de los países del euro pidieron hoy a Chipre que presente rápidamente los detalles de un nuevo plan de rescate. “El Eurogupo está dispuesto a debatir con las autoridades chipriotas una nueva propuesta, que esperan presenten lo más rápido posible”, se indicó en un comunicado.


La propuesta será sometida al análisis de la Comisión Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que conforman la troika de acreedores internacionales, antes de continuar “las negociaciones sobre un programa de ajuste” con Chipre.


“El eurogrupo reafirma la importancia de garantizar totalmente los depósitos por debajo de los 100.000 euros en la Unión Europea”.


El nuevo plan prevé la creación de un fondo con aportaciones de la Iglesia, las cajas de ahorro y otras instituciones para que emita bonos del Estado, contribuyendo así a los créditos de emergencia internacionales que recibirá la isla mediterránea.


Según informaciones no confirmadas oficialmente, el plan prevé una limitada imposición de una tasa a los depósitos bancarios para recabar los 1.000 millones de euros que aún faltan.


De acuerdo con medios chipriotas, esa tasa sólo se aplicará a los depósitos de más de 100.000 euros.


Tras alcanzarse el acuerdo, el vicepresidente del partido conservador DYSI, Averof Neofytou, se declaró “moderadamente optimista” sobre la posibilidad de que pronto se halle una solución a la crisis.


Mientras tanto, el Banco Central adoptó hoy las primeras decisiones concretas para el saneamiento de su golpeado sector bancario y evitar el colapso del Banco Popular (Laiki Bank), informó el presidente del Central, Panikos Demetriades.


El banco se dividirá en un banco capaz de funcionar y un “banco malo”, señaló una portavoz.


Según informaciones a las que tuvo acceso la agencia de noticias DPA, el “banco bueno” conservaría los depósitos de hasta 100.000 euros y una parte de los activos inmobiliarios, así como los créditos normales. Y esa parte se fusionaría con otro gran banco, el Cyprus Bank.


El “banco malo” comprendería los créditos inseguros y los activos inmobiliarios no necesarios. Un administrador de insolvencias intentará obtener efectivo vendiendo esos edificios y alistando los créditos inciertos.


Demetriades habló de un paso para cumplir las condiciones de la troika de acreedores internacionales, pero la medida fue criticada por líderes sindicales.


Los políticos pidieron a los ciudadanos que contengan los nervios. “No debe cundir el pánico”, se repetía hoy en Nicosia.


El BCE había advertido que seguirá enviando su ayuda de emergencia a los bancos de Chipre sólo hasta el lunes 25 de marzo y que a partir de esa fecha, la entidad sólo volverá a enviar fondos cuando se haya puesto en marcha el plan de rescate de la UE y el FMI que garantice la solvencia de los bancos.


Se considera que los dos mayores bancos de Chipre de hecho están en suspensión de pagos.


Por otra parte, el ministro de Finanzas chipriota, Michalis Sarris, anunció en Moscú que Rusia no acudirá en ayuda de Chipre con un nuevo crédito.


“Ellos no nos pueden ayudar con un crédito porque haría aumentar nuestras deudas”, explicó Sarris en declaraciones a la televisión chipriota desde la capital rusa.


Mientras, la agencia de calificación crediticia Fitch criticó hoy duramente la gestión de UE de la crisis de Chipre y alertó de los peligros de haber sentado un “precedente” al gravar los depósitos de los ahorradores chipriotas.


A pesar de la delicada situación en Chipre, los expertos de la agencia de calificación no ven un peligro de contagio a otros países de la Eurozona.


El gobierno de España insistió en que no hay posibilidad de que la crisis de Chipre pueda pasar factura directa a ese país: “No hay la menor posibilidad de contagio”, aseguró el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo.



No hay comentarios:

Publicar un comentario