El presidente de Venezuela advirtió que está dispuesto a “confiscar almacenes enteros” para garantizar el abastecimiento de productos básicos, luego de que el índice oficial de escasez alcanzara su mayor nivel desde enero de 2008.
“Si tengo que confiscar almacenes enteros para sacarle al pueblo sus productos y venderlos a los precios justos, lo voy a hacer a partir de hoy todos los días”, dijo Maduro durante un acto gubernamental en Caracas, informaron las agencias de noticias AVN y EFE.
En tanto, el Banco Central de Venezuela (BCV) informó que el índice de escasez ascendió el mes pasado a 22,4 por ciento -su nivel más alto desde enero de 2008, cuando llegó a 24,7 por ciento-, tras haberse ubicado en septiembre en 21,2 por ciento.
Asimismo, los precios minoristas aumentaron 5,1 por ciento en octubre, lo que determinó tasas de inflación de 45,8 por ciento para los primeros 10 meses del año y de 54,3 por ciento para los últimos 12 meses, según publicó el BCV en su página de internet.
La inflación y el desabastecimiento de productos básicos viene afectando crecientemente a Venezuela desde la instauración, a comienzos de 2003, del régimen de control de cambios aún vigente.
Maduro anunció ayer que creará un “sistema de fijación de precios justos y máximos”, un “fondo especial de compensación y estabilización para la protección de los precios de los bienes y productos de consumo masivo”, y una “corporación nacional de comercio exterior”, entre otras medidas.
Con los dos primeros mecanismos se apunta a reforzar el control de precios, en tanto con el último se busca administrar las importaciones y alentar las exportaciones no petroleras, explicó.
“Vamos a iniciar una gran operación en todo el territorio nacional de lucha contra la especulación y el acaparamiento, una gran operación cívico-militar” mediante la cual se inspeccionará “hasta el último almacén”, dijo ayer el mandatario.
“Vamos a iniciar una gran operación en todo el territorio nacional de lucha contra la especulación”
Nicolás Maduro
Las medidas fueron criticadas hoy por la Mesa de Unidad Democrática (MUD) que nuclea a 29 partidos opositores, que opinó que con ellas “podría agravarse” la “severa e inocultable crisis económica” que vive el país, y por ciudadanos que llamaron a través de Twitter a una “marcha autoconvocada” en 55 ciudades para el sábado próximo.
Maduro reiteró hoy que “la economía venezolana está perturbada por una guerra económica” declarada por “esa burguesía parasitaria que quiere robar” y que “tiene sus días contados”.
Mientras el jefe del Estado hacía esas afirmaciones en Caracas, en Puerto Cabello, principal entrada comercial marítima a Venezuela, en el centro-oeste del país, militares revisaban 47 contenedores en los que hallaron irregularidades, según informó el ministro de Transporte Acuático, general Hebert García Plaza.
“Es aberrante, es vergonzoso lo que acabamos de encontrar acá”, dijo el militar y detalló que en varios de esos contenedores había productos con un “precio real” apenas superior a 1,3 millones de dólares pero para cuya importación se habían solicitado más de 12,8 millones de dólares.
Maduro pidió al Servicio de Inteligencia y a la Policía que actúen contra quienes importaron esas mercancías y “vayan a ponerles los ganchos (grilletes) a estos burgueses parásitos”.
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