jueves, 30 de enero de 2014

En pleno enfrentamiento del diario El Mundo con Rajoy, despiden Pedro J. Ramírez, fundador y director

El director y fundador del diario español El Mundo, Pedro J. Ramírez, fue cesado de su cargo, que ostentaba desde 1989, en pleno enfrentamiento del periódico conservador con el gobierno de Mariano Rajoy, según fue anunciado oficialmente por el matutino.


El relevo del polémico periodista, reconocido ultraconservador y autor de numerosas teorías conspirativas, se atribuyó oficialmente a la decisión de “iniciar una nueva etapa” en la Dirección Editorial y a los problemas financieros del rotativo madrileño, el segundo más importante de España en número de ventas.


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Sin embargo, era conocido el enfrentamiento del matutino con el gobierno español por el escándalo de corrupción que sacude al derechista Partido Popular (PP).


Unidad Editorial, empresa editora de El Mundo, informó a través de un comunicado que el hasta ahora vicepresidente del periódico, el periodista Casimiro García Abadillo, sustituirá a Pedro J. Ramírez por decisión del Consejo de Administración.


El Mundo acumula desde 2009 graves problemas financieros, que motivaron hasta tres despidos colectivos y un plan de bajas con incentivos, y que llevaron al periódico a acumular pérdidas de 470 millones de euros en 2012.


La guerra abierta quedó declarada cuando El Mundo publicó que la justicia había descubierto que el ex tesorero del PP, Luis Bárcenas, escondía millones de euros en Suiza


Sin embargo, el distanciamiento de Pedro J. -como se conoce popularmente a Ramírez- era un secreto a voces en España desde que el director de El Mundo se convirtió en un azote permanente para el presidente del gobierno y líder del PP, Mariano Rajoy, alguien que nunca contó con la simpatía del director del periódico, más cercano al ala ultraderechista del partido.


La guerra abierta quedó declarada cuando a principio de enero de 2013, El Mundo publicó que la justicia había descubierto que el ex tesorero del PP, Luis Bárcenas, entonces sólo imputado por corrupción en otro caso de la misma índole conocido como Gürtel, escondía millones de euros en Suiza.


En pocos días, el entorno de Bárcenas filtró la contabilidad paralela del PP al diario El País, de la que se desprende una presunta financiación ilegal de la fuerza derechista y el cobro de dinero en negro, incluido el propio Mariano Rajoy.


Y en julio, Ramírez publicó una conversación con Bárcenas en la que el extesorero admitía la autoría de las llamadas cuentas B y la financiación ilegal, y entregó al juez del caso, Pablo Ruz, pruebas que acreditaban las graves revelaciones que comprometen al presidente del gobierno español.


También reveló que Rajoy siguió cobrando dinero en negro en los últimos años. El “caso Bárcenas” alcanzó así su apogeo, aunque sin consecuencias políticas de relevancia para el oficialismo.


En paralelo, también creció el escándalo de corrupción vinculado a La Corona española, el famoso “caso Nóos” en el que están imputados la Infanta Cristina, hija menor del rey Juan Carlos, y su esposo, el duque de Palma, Iñaki Urdangarín.


El Mundo también tuvo un papel relevante publicando los correos electrónicos que intercambiaron Urdangarín y su exsocio, Diego Torres, en los que se ponía de manifiesto que la Casa Real y el propio rey tenían conocimiento de las actividades del duque de Palma, quien usó sus influencias para apropiarse de seis millones de euros de fondos públicos a través de su fundación Nóos.


En España, la monarquía no cuenta con el apoyo de los partidos de izquierda, nacionalistas e independentistas, pero tampoco es respaldada por ciertos sectores de la ultra derecha, que consideran que el rey Juan Carlos traicionó a Franco, quien lo había designado como su sucesor.


Algunas versiones periodísticas atribuyen las presiones sobre El Mundo a la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, mientras otras señalan que Rajoy habría tenido un papel directo en su reciente viaje a Italia, ya que Unidad Editorial está controlada en un 96% por el grupo italiano RCS MediaGroup.


De hecho, en el comunicado que anunció su relevo, Pedro J. manifestó que sus sentimientos son “encontrados” y que si de él hubiese dependido, “habría seguido siendo director de El Mundo toda mi vida”.


Pedro J. Ramírez nació en Logroño en 1952, y con menos de 30 años fue nombrado director de “Diario 16″, rotativo del que fue cesado y desde el que mantuvo un fuerte enfrentamiento con el ex presidente socialista Felipe González, en medio de la “guerra sucia” contra ETA.


En octubre de 1989 Pedro J. fundó El Mundo junto a otros periodistas y en sus casi 25 años al frente de la publicación mantuvo una línea editorial cercana al PP, llegando a sostener teorías conspirativas como la que sostuvo que el opositor PSOE y ETA estuvieron detrás de los atentados islamistas de marzo de 2004.


Pedro J. veía conspiraciones por todos lados.


Una de las más sonoras surgió en 1997 cuando acusó al PSOE de estar detrás de la publicación de un video, en el que aparecía de espaldas, vestido con un tutú rosa, amarrado a la cama, mientras una mujer africana lo sodomizaba con un vibrador.


El periodista, un hombre ultraconservador, que varias veces había hecho comentarios racistas y que no ocultaba sus vínculos con el Opus Dei, y que sigue siendo un asiduo tertuliano de la emisora Cope, de la Conferencia Episcopal, acusó entonces a sus “enemigos” de haberle tendido una trampa.


A pesar de que dijo que todo había sido un “montaje”, finalmente, la mujer africana fue condenada a cuatro meses de cárcel por difundir el video.



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